Malditos.. y una vez más, malditos somos poetas..
Porque en el hechizo de escribir, pactamos un sin sabor que refleja los más
sombríos, veraces, impíos y dulces fantasmas que divagan alrededor de las
mascaras que reclaman llamarse personas.. Malditos por dibujar noches,
disfrazadas de tardes, y fumar un cigarrillo mirando las estrellas, esas mismas
que mal vendemos a un amor de verano por beso, y que están pálidas y cansadas,
de oír los gritos de la voz de nuestra desfachatada consciencia, y sobre todo
del estigma de ser incomprendidos.. Malditos porque mientras dirigimos nuestra
propia sinfonía de palabras desordenadas, vamos haciendo que todo y nada, cobre
sentido..